El CIBERSAM difunde una guía para periodistas sobre cómo informar con responsabilidad acerca de los suicidios
“Los periodistas juegan un papel importante y positivo en la prevención de los suicidios”.
Con el objetivo de ofrecer a los profesionales de la información un manual que recoja pautas sobre cómo se debe informar de manera responsable sobre el suicidio, desde el Centro de Investigación Biomédica en Red de Salud Mental (CIBERSAM) se ha presentado una “Guía para periodistas sobre la cobertura mediática del suicidio”.
La cobertura que los medios de comunicación hacen de la conducta suicida puede tener efectos muy relevantes sobre el resto de la población. Una cobertura centrada en ejemplos de personas que buscan ayuda y superan una crisis de suicidio, puede tener un efecto positivo entre las personas con riesgo de suicidio (efecto Papageno). Por el contrario, el efecto Werther o “efecto contagio” se produce cuando una persona que muere por suicidio (p.e., famoso, pariente, amigo, figura ficticia de novela, etc.) sirve de modelo para posteriores actos suicidas.
De forma resumida, la guía contiene las siguientes recomendaciones:
Cómo se debe informar
El mensaje principal de la noticia debe ser animar a las personas a buscar ayuda y proporcionar información sobre dónde encontrarla, incluyendo datos de contacto y recursos sanitarios.
Se debe aprovechar la noticia como oportunidad para educar e informar a los lectores sobre los factores de riesgo, señales de alerta y avances sobre el suicidio, tratándose como un problema de salud pública.
Es recomendable incluir información sobre habilidades de afrontamiento o estrategias para gestionar las crisis, alternativas de solución de problemas, y opiniones de profesionales expertos en la prevención del suicidio (psiquiatras, psicólogos).
Los suicidios de personajes famosos, y aquellos cometidos tras un asesinato (una persona se quita la vida tras matar a otras previamente), deben tratarse con especial precaución.
Cómo NO se debe informar
La noticia no debe publicarse en la portada de los medios, ni contener titulares sensacionalistas. No se debe compartir a través de redes sociales, ni informar sobre ella igual que se haría sobre un delito.
El suicidio no debe presentarse como algo heroico o como una solución razonable ante una crisis. Tampoco debe presentarse como indoloro, rápido y fácil de imitar, evitando mencionar los métodos utilizados, los lugares del suicidio, o cualquier otra información detallada.
No deben utilizarse fotos o vídeos de la persona fallecida, amigos o familiares tras la muerte, ni mencionarse preparativos previos al suicidio como cartas de despedida, notas o pactos.
Las causas del suicidio no deben simplificarse a un único acontecimiento. La información de las causas no debe provenir de la policía, servicios de emergencias o testigos, sino de las opiniones de expertos.
A través de una información responsable, los periodistas pueden mejorar la conducta de búsqueda de ayuda por parte de las personas afectadas, aumentar la conciencia pública y reducir el estigma relacionado con las enfermedades mentales. En la sociedad de la información la pregunta no es si debemos hablar sobre el suicidio, sino cómo debemos hacerlo.
Para ver la guía completa se puede acceder a través del siguiente link: https://gacetamedica.com/wp-content/uploads/2022/05/EAAD-Best-Guidelines-for-Journalists-Media-Coverage-of-Suicide_ESP.pdf