¿Qué está fallando y qué podemos mejorar en la comunicación sobre el suicidio?
“Si el periodista conoce la realidad del efecto papageno, podrá afrontar su trabajo con la convicción de echar una mano”
En anteriores noticias publicadas, hemos abordado la importancia de la comunicación responsable sobre la conducta suicida y cómo el informar sobre ella puede ayudar en la prevención del suicidio.
Molo Cebrián comunicador, estudiante de psicología y creador del pódcast “Entiende tu Mente” en el que trata diferentes temas vinculados a la salud mental, nos habla sobre dos temas esenciales, ¿Qué dificultades encuentran los profesionales de la comunicación a la hora de informar de una noticia relacionada al suicidio? y ¿qué queda por hacer para que exista una buena comunicación respecto al suicidio?
Ante la primera pregunta y a pesar de que en la actualidad no ejerce en un medio de comunicación tradicional, Molo con su extensa experiencia en redacción de diferentes medios, opina que “en general no disponemos del conocimiento necesario para poder realizar un relato donde se cuiden los elementos que puedan hacer de un artículo, reportaje o pieza informativa, un contenido apto para ser consumido por una persona con ideación suicida o un superviviente. No ayuda en algunos casos el que se mida la calidad de una noticia por el número de clics que ha generado”. Además en una entrevista realizada en El Magazine Cultural, Molo enfatiza las ventajas de nuevos formatos como el podcast para conectar con los oyentes, permitiendo abordar temas tan sensibles como los problemas de salud mental.
Por otro lado, considera esencial la formación y concienciación de los profesionales de la comunicación. “Si el periodista es consciente de que cualquier persona en un momento de su vida puede tener ideaciones suicidas y que algunos estímulos son capaces de acercar o alejar a esa persona de ese estadio; aparece la opción de tomar el camino de la co-responsabilidad. Si el periodista se aleja de los clichés y conoce ya no solo la realidad del efecto contagio -del que tradicionalmente se ha hablado en las facultades de comunicación-, sino también el efecto papageno, podrá afrontar su trabajo con la convicción de poder ya no solo informar con rigor, sino además echar una mano. Eso sí, esta formación y concienciación parece obvio que debería comenzar por los puestos más altos de cada redacción”.